1) "Y el premio a la madre del año es para..."
...cualquiera, menos Rachel Matheson. Ojo, me gusta muchísimo cómo está encarado el personaje este año, le han dado una profundidad emocional que antes no se le percibía, y Liz Mitchell lo lleva excepcionalmente (tanto es así que la he votado en los People Choice Awards...) Con todo, su faceta maternal sigue mereciendo palos. Y claro, de tal madre, tal hija... El reencuentro de Charlie con su tío (¿tío...? se salva porque el apagón impide que le hagan la prueba del ADN, ese...) y, después, con Aaron, fue tierno, hermoso, lleno de sentimiento. Pero cuando la mamá y la nena se encontraron... nada, ché, no pasaron dos minutos hasta que comenzaron a discutir nuevamente.
Bueno, sí, yo también me cabrearía si mi Lula le diera ese abrazote al tío Eduardo y a mí, lola...
Ese vínculo es interesantísimo, uno de los mejor trabajados de la serie, desde el punto de vista argumental, y justamente el que me hizo quedar pegada al televisor cuando, de casualidad, encontré un capítulo de Revolution por primera vez. Y es lógico que esté signado por la tensión. No nos olvidemos las circunstancias en que ambas se separaron cuando Charlie era pequeña. Rachel ha intentado más de una vez reposicionarse en su papel materno, pero ha sido su propia hija quien le ha demarcado los límites. ¿Con o sin razón? Creo que hay argumentos a favor de ambas posturas. Ya dije una vez, no se puede pretender entrar y salir de la vida de un hijo permanentemente, y que todo siga igual. Pero Charlie... ay, chica, podrías darle algo de crédito a tu madre... ¿sería factible que, de vez en cuando, te pusieras en su lugar y te dieras cuenta de todo lo que ella ha sufrido, también? Sí, lo sé, los hijos podemos ser muy pero muy exigentes, y tenemos una memoria de elefantes...
Y sí, lo cierto es que, de tal palo... tal chichón.
Lo que no quita que Rachel, tratando a la niña de estúpida al momento de reencontrarla, haya hecho justamente lo menos indicado para recuperar una relación por demás golpeada y maltratada.
Esas son las cosas que me hacen verosímil esta historia.
2) Padre Coraje.

3) ¡Aaron es la versión post-apocalíptica de Hulk!
Otro personaje movido y conmovido por sus afectos es Aaron Pittman. Ahora sabemos que sus "superpoderes" no son tan nuevos, que ya había tenido que ver con la incineración de indeseables en el pasado cercano, y que esas capacidades se vinculan con sus estados emocionales, especialmente con la ira. "Cuidado, no hagan enojar a Aaron" parece ser el mensaje.

4) "Las cosas que hago por amor" reloaded.

Parece que no es sólo Jaime Lannister el que se mueve impulsado por los sentimientos. Sebastian Monroe viene diciendo desde la temporada pasada que todo, absolutamente todo lo que ha hecho con la Milicia y después, ha sido por su amistad con Miles. Y ahora, luego de cuatro capítulos de conmiseración y náusea autocompasiva, ha vuelto a aparecer su costado psicopático y desequilibrado más fascinante. Todo sea por "salvarle las papas" a su amigo... aunque Bass tiene un concepto bastante raro de las cosas que uno debería hacer por amistad... y una visión un tanto distorsionada de lo que su amigo quiere (aunque, claramente, eso tiene que ser porque se ha perdido la "evolución" que viene haciendo el personaje de Billy Burke).
Ah... ¡y cómo ha disfrutado el Team Miloe con este reencuentro! Basta darse una vuelta por Tumblr para ver que la fantasía de una relación homoerótica entre estos dos monumentos a la testosterona ha reverdecido. Aunque, si me permiten un cometario rayano en la grosería, opino que el Miloe, lejos de ser cosa de homosexuales, es producto de la imaginación calenturienta de unas cuántas que se derriten soñándose liadas en un trío con esos dos. En fin, yo las comprendo, aunque ya saben, en mi caso me quedaría nomás con el morocho.
Los guionistas se la están pasando en grande, no me cabe duda... lo extraño es que yo pueda hacer un comentario relativamente racional a la vista de cómo está de desprendida esa camisa...
Como sea, los guionistas han aprovechado al máximo la veta, con una serie de diálogos y situaciones que, fácilmente, permiten el desliz al equívoco. Y es que, Miloe o no, lo cierto es que David Lyons y Billy Burke, en pantalla, desarrollan una química absolutamente increíble. Es un auténtico goce estético verlos juntos y en acción... aunque sea "pasando en limpio" una partida de patriotas.
Con lo cual, ahora sí, desbarrancamos definitivamente en la ZOOOONA FANGIRL!!!!
5) Objetos de uso cotidiano: el pulmotor.
Cada jueves necesito un pulmotor. Es el día que miro el capítulo semanal de esta serie. Y todas las semanas me pregunto lo mismo: qué moños comerá don Billy para estar cada vez más fuerte.
En el capítulo anterior eran las frases cursis y dulces. En este... fue la sonrisa. Vean a qué me refiero:
Tengo testigos, casi me desmayo en ese preciso momento.
No, es cierto, no fue solo la sonrisa. Fue la actitud. Lo que me pierde, literalmente, de este personaje es la actitud, la manera en que encara las situaciones. Su capacidad de liderazgo innata me ha resultado absolutamente seductora, así como el hecho que pierda los estribos cuando las cosas amenazan con írsele de las manos. Como dicen los tags del tumblr: "OMG, sexy bastard!"
Por mi salud mental, que alguien le abroche un botoncito... no, mejor se los desprendemos todos...
Terminamos el capítulo con una nueva guerra en ciernes, con dos amigos-enemigos que se verán obligados a pulir su vínculo, con un padre dispuesto a ir al rescate de su prole y con un bando patriota que da señales de estar dividiéndose contra sí mismo. En fin, parece que, ahora que "la familia está reunida", las cosas se van a complicar. Ojalá valga la pena verlo.
ÚLTIMO MOMENTO!!!!!!!!! Esta entrada ha venido retrasada por la "veda electoral" (fui a votar antes de publicarla... deber cívico, que le dicen...) y en el interin pude enterarme que TENEMOS REVOLUTION 2 EN CABLE A PARTIR DEL MARTES 5!!!!!! En Argentina, se emitirá por Cinemax, los martes a las 22:00. Averigüen, debe estar comenzando más o menos para la misma fecha en toda Latinoamérica... Yuuuupiiiii!!! Dichosos los ojos que te ven... ;)